Y Obama ganó de nuevo en las elecciones estadounidenses

J. L. Gamallo. Las elecciones más importantes para el destino del mundo se celebraron ayer en los Estados Unidos, con toda una serie de ritos y complicadas liturgias electorales que desde Europa se ven un tanto "exóticas", aunque desde luego no podemos ir nosotros a decirles como tienen que votar. De hecho, si se obvia la democracia clásica ateniense, que era de aquella manera, se puede decir que los Padres Fundadores fueron los creadores de la democracia moderna, aunque no cabe duda eu tuvieron muy en cuenta a las instituciones de griegos y romanos a la hora de redactar la Constitución que les sigue funcionando. Creo que ya sabemos todos que la elección del presidente no se hace de manera directa, sino en segunda instancia. Cada estado tiene un número proporcional de votos, p. e. California tiene 55, y se los lleva todos quien tenga más votos populares tenga. Así se podría dar la paradoja de que un candidato tuviera más votos populares, pero menos votos electorales, que son los que cuentan a la hora final. Una forma de contrapesar las zonas más y menos población. Básicamente el presidente reeligido ha gando en los estados del Pacífico, del Atlántico y de los grandes lagos, mientras que Romney, que se ha quedado con lo que se podría denominar la América profunda. Su triunfo no ha sido ahora tan grande, donde sin duda la crisis le ha pasado factura. Y en ese contrapeso de poderes entre el ejecutivo y el legislativo, los republicanos siguen siendo mayoria en el Congreso. Algunas manifestaciones de líderes republicanos, como las de Todd Akin, sobre la legitimidad de las violaciones no han debido ser muy beneficiosas para su candidato. En ese día también se celebran referenda en cada estado sobre diferentes cuestiones, como el matrimonio homosexual, la legalización de la marihuana para usos médicos, la eutanasia, caza y pesca, emigración ilegal. Por ejemplo en Minessota se votaba si se permitían las bodas homosexuales y si eran necesario a la hora de votar llevar una identificación fotográfica. Ambas propuestas han sido rechazadas. Para España, obligada a llevarse bien con todo los presidentes, en principio daba igual uno que otro, aunque Romney estaba más en la línea de austeridad de la cancillera Merkel.