Los bolsos de la UGT

J. L. Gamalllo. Ya forman parte del paisaje de muchas de nuestras calles comerciales y de los mercadillos de barrio, los puestos con artículos de imitacion de marcas famosas, a precios mucho más asequibles para nuestros bolsillos que los de ese firmas estratosfericas, sólo al alcance de unos pocos provilegiados. Se falsifica de todo, ropa, complementos, perfumes, zapatos, etc. Aunque la diferencia de calidad con el original muchas veces sea notoria. Los CDs y DVDs de musica y peliculas están ya casi desaparecidos, Internet tambien ha dejado su huella en los manteros musicales. La mayoría de estos productos viene de China y Oriente donde copian cualquier cosa que se les ponga delante en un par de dias. Son el terror de las marcas de lujo de Europa y USA, que ven como les piratean descaradamente sus diseños. Evidentemente las condiciones de trabajo de los obreros en China y Oriente no son las que tienen el Occidente, donde los sindicatos desde hace el siglo XIX han venido luchando para mejorar las condiciones laborales y salariales, y en la actualidad luchan contra la deslocalizacion de las empresas, que se llevan al Tercer Mundo, donde todo es más barato. En España la UGT y CCOO eran las abanderadas en el mantenimiento de los derechos de los trabajadores. Pero desde hace un tiempo la UGT, especialmente la rama andaluza esta en los medios de comunicacion por haberse beneficiado de supuestas ayudas fraudulentas por parte de la Junta de Andalucia. Pero la noticia chusca, sino fuera por lo que supone, saltó a principios de semana, cuando se supo por el diario El Mundo que el secretario de Administracion de la Federacion andaluza compró un bolso de la marca Salvador Bachiller y encargó a su proveedor que le hicera 700 copias en Oriente. Estos bolsos, junto con 1000 bolígrafos de Francis Montesinos fueron regalados a los asistentes a su IX Congreso celebrado en Sevilla en 2009. Hasta aqui la cosa ya tiene su aquel, pero no todo termina aqui. La UGT cargó los gastos de la compra de los bolsos y los boligrafos (mas de 100.000 €) a cuatro subvenciones de la Junta de Andalucia. El proveedor presentó cinco facturas falsas que se cargaron a las subvenciones destinadas a la publicidad de los planes formativos  destinados a parados andaluces, por medio del programa Forman XXI, a otras ayudas para planes de mujer, juventud y el programa Perseo. Al final UGT se ha comportado como cualquier empresa que hace sus pedidos en Oriente, a las que cuales critica acerbamente, y ademas piratea los diseños de un fabricante español de prestigio (Salvador Bachiller), y para remate camufla los gastos en facturas con cargo a subvenciones públicas. Habrá que esperar las explicaciones para tal comportamiento asi como las dimisiones pertinentes. Ademas el pagar los bolsos por medio de facturas falsas entraria en un comportamiento quasidelictivo.